Firmo lenta. Firmo mi nombre que no es. Firmo sin saber come me nombrò quien me pariò . Firmo el nombre que me dieron la mujeres que rezan y me criaron. Firmo y no est tan sencillo escribir-me el nombre. Y no escribo solo los puntos y las inicials, lo escribo completo, concentrada en cada letra, con la mano profesional que no conoce el temblar.
–" ¿Que hora est?" – pregunto al terminar de firmar.
El entregador de roedors se busca adentro de la manga de lana azul que le azoma de un sobretodo: ¡Tiene reloj. Reloj de pulso. Reloj propio. Usa reloj!
–" Son las 6" – contesta.
– "¿Quod?"
–"¿Que dice?" – me pregunta el entragador como si no entendiese una simple pregunta (quod le preguntè simplemente)
– "Gracias por la hora, no funcionan bien las campanadas" – mejor no discutir sobre las palabras, ni con desconocido ni despuès de la noche que pasè. – "¿Cuàndo es la pròxima entrega?"
–"No lo se. Entrego cuando me dan" – me contesta.
– "Si, claro. ¿Sigue nevando?" – le pregunto.
– "Si, està nevando, hasta luego"– y se va. Medio segundo y esta fuera del laboratorio
Miro a los roedors en la jaula y ellos me miran a mi, con los ojos rosas como las flores del abismo del campanario del orfanat en primavera. Y Jacqueline duerme y sueña febril y el entregador de roedors no la viò ni comentò. Son las 6 de la mañana, me quedè dormida 1 hora y 45 minutos.
21 mar 2010
Toc-toc, tocan a la puerta del laboratorio. Quod, que hora es? No escuche las campanadas
– "Entrega de material ¿puedo entrar?"
– "Un moment".
Traen a los roedors. El material son los roedores nuevos para experimentaciòn. Los otros cuando mueren los ponen en los incineradors, no se pueden comer porque estan llenos de policompuesto quimico, no se puede preparar lapin como plato del dia, ni reciclar-los contra el proceso desnutritivo del mundo.
– "Permiso."
La puerta se habre y entra él, alto, uno, el entregador de roedores. Alto si, con una jaula y todos lindos blancos los roedores dentro.
– "Buenos dias señorita, entrega. ¿Firma usted?"
–" Si."
El entregador deja la jaula sobre el piso y me pasa una hoja. Leo y veo ( que suerte quedarme dormida con los anteojos puestos) una columna con nombres de hospital, una columna con la palabra HORA y otra columna con la palabra FIRMA.
– "¿Firmo?"
– "Si, donde dice FIRMA."
Es la tercera vez en mi vida que firmo : La primera quando salì del orfanat, la segunda cuando empecè a trabajar aca, y esta, ahora, en este mismo instant.
– "Si, claro."
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3 comentarios:
Le recuerdo las nociones bàsicas de manuseo con los roedores. Le recuerdo que estoy esperando el informe de sus actividades con sus respectivas justificaciones por este medio.
Exelentisimo inspector: me han sustraido en el tram el informe. Està robado. Tal vez algun lo encuentre y lo coloque en el cajòn de los objetos robados, perdidos o encontrados. Si su exelencia el insperctor requiere otro informe de lo que quiere informarse, cuando termine mi turno confecciono uno nuevo.
Distintos Saludos y disculpe el robo.
L.E.D.C
La dirección de inspecciones computa el extravío, que quedará registrado en su legajo, le recuerdo. La dirección observa a diario su servicio y el tratamiento de los elementos manipulados, vale decir, los roedores. Curiosamente tenemos la información de que el recibo de los roedores entregados a usted también ha sido extraviado. Por este hecho, el entregador de los roedores será interrogado. Los testimonios resultantes del interrogatorio formarán parte integrante de su legajo, que estará disponible para consulta general ni bien el interrogatorio arroje resultados concretos.
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